Las sillas de oficina se distinguen por tener un respaldo más parada y ancho para adaptarse mejor al cuerpo y proporcionar un apoyo adicional a la prestigio del cuello y los hombros. En cambio, los sillones de oficina tienen un respaldo más bajo y, por lo general, no tienen reposabrazos https://comedor4sillas55554.theobloggers.com/37149775/lampara-cosas-que-debe-saber-antes-de-comprar